Investigadores comunicaron en el Congreso Virtual de la EAN que a pesar de que el estudio TERIKIDS no logró cumplir su criterio de valoración principal, los pacientes pediátricos con esclerosis múltiple (EM) obtuvieron beneficios similares del tratamiento a los pacientes adultos. Como explicó la Dra. Tanuja Chitnis del Massachusetts General Hospital for Children de Boston (EE. UU.), un alto cruce del grupo placebo al tratamiento activo sesgó los resultados en contra de la eficacia del tratamiento.